BODEGAS DE LA D.O. JEREZ
El hábitat de "confort" para el fino de
Jerez se ha calculado en la localidad de Sanlúcar
de Barrameda, donde se realiza la crianza de la manzanilla
de forma constante durante todo el año. La media
de temperatura (18 ºC) y humedad (74,25 %), que se
mantienen muy estables durante todo el año, coinciden
con los valores idóneos para la crianza de la manzanilla
de Jerez (18-22ºC, 70-75%), aunque la temperatura exterior
está ligeramente por debajo de las exigencias de
la bodega. Tanto la orientación de la planta, como
las características constructivas de la fachada y
cubierta de la bodega, se convierten en filtro que rechaza
o capta hacia el interior los elementos climáticos
exteriores para la crianza del vino. Se evitan las fluctuaciones
de temperatura interior gracias a la inercia térmica
de los muros y su permeabilidad a la humedad, consiguiendo
calibrar la estabilidad de las constantes higrotérmicas
día/noche. Además de todas estas consideraciones
bioclimáticas, el proceso exotérmico que se
produce durante el desarrollo de las levaduras de velo desprende
algo de calor, que repercute levemente en la temperatura
de la bodega. Los meses de enero y diciembre son los únicos
que no entran dentro del umbral del confort del vino de
Jerez, inconveniente que se resuelve mediante el calentamiento
de la fachada por radiación solar. Durante las noches
más frías (nunca inferior de 0º), la
inercia térmica del muro transmite el calor al interior
de la bodega, manteniendo así los valores de temperatura
aptos para el desarrollo de la levadura bajo "velo
de flor". En los meses de julio y agosto el sobrecalentamiento
de la fachada incide en el espacio interior de la bodega
a última hora del día debido al gran espesor
del muro, y este efecto se contrarresta con la medida correctora
del riego del albero que cubre el suelo de la bodega. Estas
condiciones específicas del oxígeno del espacio
de la bodega se trasmiten, a través de los finos
poros de la madera, al espacio interior de la bota (1/6
de su capacidad) para que pueda desarrollarse la sensible
levadura.